Oraciones Para Hora Santa Jesús Sacramentado

Concédeme, Señor, una buena preparación para la desaparición y un beato temor al juicio, para librarme del infierno y conseguir tu gloria. “Dios eterno y todopoderoso, me acerco al sacramento de tu Hijo unigénito, nuestro Señor Jesucristo, como se aproxima al médico el enfermo, el pecador a la fuente de clemencia, el ciego al resplandor de la luz eterna y el pobre e indigente al Dios del cielo y de la tierra. Concédeme, Padre lleno de amor, llegar a contemplar al término de esta vida, frente a frente y para siempre, a tu amado Hijo, Jesucristo, a quien voy a recibir el día de hoy, oculto en este sacramento.

Al que le devora la sed de lo eterno, ha de ocasionarle fastidio lo efímero y transitorio» (Cta. 111,3). Santa María, Madre nuestra, confiamos en tu Inmaculado Corazón que nos alcances gracias para perseverar en la fe, animarnos por la esperanza y vivir la caridad, como satisfacción por todos nuestros errores y para la salvación del mundo. Hay muchas historias de encuentros con almas del purgatorio de santurrones y santurrones. Creo, Jesús mío, que eres el Hijo de Dios vivo, que has fallecido en la cruz por mí, y estás en este momento real y verdaderamente en el Muy santo Sacramento del Altar.

Tiempo Ordinario Jesús, El Pobre Hora Santa

Hay muchosdevocionarioseucarísticos que se tienen la posibilidad de emplear en nuestras visitas. En ellos vamos a encontrar contenidos escritos valiosos, oraciones de santurrones, frases de la Iglesia, etcétera. Para la hora de adoración personal la Iglesia no ha predeterminado nada;cada quien administrará su hora de adoración como mejor crea favorable; y, sin fijarse en el reloj, finalizarla cuando se piensa que se ha acabado. Deseo estar contigo y mis conocidos cercanos en la gloria perpetua. 2.Esta presentación está hecho para una hora de adoración ante el Muy santo.

Creo, Jesús mío, que estás presente en el Muy santo Sacramento del altar. Te amo sobre todas las cosas y deseo recibirte dentro de mi alma. Mas, no logrando llevarlo a cabo ahora sacramentalmente, ven espiritualmente a mi corazón y tal y como si ahora hubiéseis venido, te abrazo y me uno a Ti. No permitas Jesús mío que jamás me aparte de Ti. 9.Esta es la misma invitación que Jesús nos hace hoy.

Celebración Conclusiva Del Jubileo Increíble En Las Iglesias Particulares

“Es hermoso estar con Él y, reclinados sobre su pecho como el discípulo predilecto, palpar el amor infinito de su corazón. ” (EncíclicaEcclesia de Eucharistia, 25). El que come mi cuerpo y bebe mi sangre, tiene vida eterna.

oraciones para hora santa jesús sacramentado

Nuestra enseña será la virtud. San Conrado, el portero bendito, que derrama torrentes de luz. Tú la cuna de nuestros amores, tú la cumbre de nuestra grandeza. AÑO DEL BUEN PASTOR HORA SANTA JESÚS, EL BUEN PASTOR DE RODILLAS AÑO DEL BUEN PASTOR EXPOSICION BENDITO, BENDITO, BENDITO SEA DIOS, Bendito, bendito, bendito sea Dios, los ángeles cantan y alaban a Dios.

Va a ser considerado grande en el reino de los cielos. Empezaremos con una oración al Espíritu Beato, y después un canto que nos puede ayudar a relajarnos y entrar en charla con Jesús. Para ayudarnos con ese cariñoso diálogo con Jesús Sacramentado, verdaderamente presente aquí, el día de hoy traeremos a la mente algunos de las promesas que Él nos ha hecho. Aún mucho más, es un tiempo para percibir, para oír lo que Jesús nos significa. Y para lograr oír, necesitamos estar quieto ante Él, silenciar nuestra lengua, nuestro cabeza y corazón, y en esa ausencia de estruendos, percibir. Es un tiempo para hablarle del profundo de nuestro corazón, así como charlamos a un buen amigo, compartiendo nuestras alegrías, nuestras tristezas, nuestras preocupaciones, nuestras esperanzas.

” , preguntó a sus discípulos en Getsemaní. “Ya que una hora es lo que deseamos ofrecerle, recordando aquella noche, para vivir y estudiar de su misma entrega”, reseña la web de Pastoral Juvenil Sevilla. Dejen que los pequeños vengan a mí, y no se lo impidan, pues el reino de los cielos es de quienes son como ellos. Cuestiones para la primera comunión. Un sacramento es un signo visible realizado por Cristo para ofrecer felicidad. HIMNO A SAN CONRADO Adelante será nuestro grito.

Tú, que eres Luz, danos luz. Tú, suma Fortaleza, fortalécenos. Que se disipe el día de hoy, Dios Eterno, la nube que nos oscurece, a fin de que con perfección conozcamos y prosigamos tu verdad con un corazón limpio y sencillo. Señor, apresúrate a socorrernos. Creo en ti, Señor, pero ayúdame a opinar con firmeza; espero en ti, pero ayúdame a esperar sin desconfianza; te amo, Señor, pero ayúdame a demostrarte que te quiero; estoy arrepentido, pero ayúdame a no regresar a ofenderte. Te adoro, Señor, porque eres mi Constructor y te anhelo porque eres mi fin; te alabo, por el hecho de que no te cansas de hacerme el bien, y me cobijo en ti, porque eres mi protector.

Del enemigo malo, defiéndeme. En la hora de mi muerte, llámame y mándame ir a ti, a fin de que con tus beatos te alabe, por los siglos de los siglos. Adoro tu Corazón lleno de amor, como agradecimiento a tan fantástico regalo; y para desagraviarte de tantos ultrajes como recibes en todos los sagrarios del mundo donde estás olvidado. Nosotros, arrepentidos de nuestros errores, queremos en la medida de nuestras fuerzas hacerte compañía por cuantos te abandonan, y dedicarte totalmente nuestra vida, como ofrenda y desagravio a tu Corazón pleno de amor hacia nosotros. “Veneran al demonio en todas y cada una partes, estamos hablando verdaderamente de un acontecimiento que convoca a muchas personas en el mundo”, dice a Portaluz el sacerdote colombiano. Creo, Jesús mío, que estáis verdaderamente presente en el Santísimo Sacramento del Altar.

Que tu sabiduría, Señor, me dirija y tu justicia me reprima; que tu misericordia me consuele y tu poder me defienda. Te ofrezco, Señor, mis pensamientos, ayúdame a meditar en ti; te ofrezco mis palabras, ayúdame a charlar de ti; te ofrezco mis proyectos, ayúdame a cumplir tu intención; te ofrezco mis penas, ayúdame a padecer por ti. Todo aquello que deseas tú, Señor, lo quiero yo, exactamente pues lo quieres tú, como tú lo quieras y a lo largo de en todo momento que lo quieras. Te solicito, Señor, que ilumines mi entendimiento, que fortalezcas mi intención, que purifiques mi corazón y santifiques mi espíritu.