Consíguenos, Santa bendita, en retorno del amor que te profesamos, de las simpatías que por ti sentimos y de la fe y el entusiasmo con que te tributamos el pobre obsequio de esta Novena, la felicidad de cumplir honrada y noblemente los deberes de nuestro estado, santificándonos en él y salvándonos por él, a través de los méritos de Nuestro Señor Jesucristo. Apiádate, ¡oh inigualable Santa Rita! Haced que con la misma generosidad perdonemos a nuestros contrincantes, para que el Señor nos perdone nuestras ofensas. Te ofrezco los méritos de todos y cada uno de los santurrones, singularmente los de mi protectora y abogada, Santa Rita de Casia, que deseaste asociarla a los sufrimientos de tu Pasión. Concédeme por su intercesión, lo que te pido en esta NOVENA…, si es para tu mayor gloria y bien de mi alma, y así un día pueda formar parte de tu gloria eterna.
Te pido me concedas el antídoto de mis necesidades que en este momento te presento…, y que coloco por intercesora a Santa Rita de Casia, a quien invocaré en esta novena. Dame, Señor tu felicidad, para que un día pueda cantar tus alabanzas en el cielo. Oh Dios omnipotente, que te dignaste otorgar a Santa Rita tanta felicidad, que amase a sus enemigos y llevase impresa en su corazón y en su frente la señal de tu pasión, y fuese ejemplo digno de ser imitado en los distintos estados de la vida cristiana. Concédenos, por su intercesión, cumplir fielmente las obligaciones de nuestro estado para que un día podamos vivir contentos con ella en tu reino.
En aquellos tiempos, el mundo se encontraba inmerso en guerras y conquistas que estaban fuera de control. Sus progenitores eran fieles devotos del cristianismo, y acostumbraban a mediar en la resolución de inconvenientes de su red social orando por la intervención de Jesús para aliviar las almas. Gloriosa santa Rita, tú que de prodigiosa forma participaste de la dolorosa Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, alcánzame que sufra, con resignación cristiana, las penas y dificultades de vida y protégeme en todas mis pretensiones. Vienen ahora años bien difíciles. Su soledad, sus lágrimas, sus oraciones.
Velones Con Oración
Su alma era una cuerda tensa que se deshacía en armonías dedicadas exclusivamente a Jesús. Por el perfecto ejemplo que diste a la gente de cada estado de vida. En ocasiones existen ocasiones que parecen inviábles de resolver.
Suene ahora en mi alma el eco de vuestra voz muy dulce y todopoderosa, a fin de que despierte del sueño de muerte en que la entretienen las nonadas y menudencias de este planeta. Mucho os he ofendido, amorosísimo Padre mío; haced, ya que, que me arrepienta y llore mis pasados yerros para que merezca amaros y alabaros en el Cielo. Aquí vas a encontrar la novena de santa Rita de Casia que te servirá para soliciar un milagro en el momento en que te halles en una situación verdaderamente desesperadas. Reza la oración santa Rita pertinente a cada día a lo largo de 9 días seguidos par que tu petición sea escuchada y contestada.
Al final, llevar a cabo la oración y los rezos durante tres días sucesivos.
Oración A San Miguel Arcángel
Como madre te suplico les protejas de toda mala energía. Bendíceme con tu amor y lléname de la felicidad de Dios. Tú, que todo lo puedes y que tienes la felicidad de Dios y el poder de conceder mis suplicas. Desde el amor y la bondad yo te pido que me escuches.
Dios nuestro, a quien adoran todas y cada una de las criaturas del cielo y de la tierra, como a su Señor, yo me uno para alabarte y bendecirte y por amor a ti, amo a mi prójimo como a mí mismo y perdono todas las ofensas recibidas. Te ofrezco los méritos de tu sierva y protectora mía, Santa Rita de Casia, a quien otorgaste incontables gracias, para vencer las mucho más difíciles empresas; te pido me concedas por su intercesión no ofenderte más y huír de las oportunidades próximas de pecado, favoreciéndome con lo que te solicito en esta NOVENA…, si es para gloria tuya y bien de mi alma. La devoción a los Santos debe ser verídica, interior, activa y persistente, es decir, que imitemos su amor a Dios, su caridad con el prójimo, su penitencia, su humildad, su fe, su religión, su justicia y su celo.
Escucha, Señor, nuestra oración, excusa mis errores, a fin de que tu clemencia se manifieste una vez más y así pueda recibir tu perdón y tu paz. Te ruego, por intercesión de Santa Rita de Casia, mi protectora y abogada, a quien concediste el don de amarte y servirte, me concedas lo que te pido en est NOVENA…, y de este modo poderte servir con renovado entusiasmo y disfrutar de forma continua de tus beneficios. Concédeme, Señor, que a imitación de Santa Rita de Casia, logre siempre y en todo momento mostrarme lleno de amor y comprensión haica mis hermanos, como ella vivió observando tu enorme mandamiento y practicando los consejos evangélicos. El día de hoy te ofrezco, Señor, sus sufrimientos y méritos, y por su intercesión te pido me concedas vivir siempre como hijo tuyo, a fin de que dé testimonio de ti en todas y cada una partes y me concedas lo que en esta NOVENA te solicito…, si es para gloria tuya y bien de mi alma. ¡Oh gloriosísima Santa Rita, cuya muerte, semejante en todo a vuestra vida, fue el espectáculo mucho más tierno y conmovedor que puede presenciarse dentro de los claustros! ¡Qué consejos y qué despedida la vuestra de aquellas hermanas del alma, que, al unísono que envidiaban tu muerte y se felicitaban por tu glorioso tránsito, se deshacían en ríos de lágrimas!
Reza la oracion santa Rita de Casia que necesites y pídele la ayuda que necesitas. ¡Oh espectacular Santa Rita, que en el prolongado martirio de tu vida recibiste, junto con las hieles de todas las amarguras y de todos y cada uno de los dolores, el ungüento de esos consuelos que embriagan y arrebatan el alma, encendiéndola en mayores deseos de padecer por Cristo, para gozar y reinar después con Él! Haz que en nuestras desolaciones y sequedades de espíritu descienda sobre nuestras ánimas el rocío de los divinos consuelos perseverando sin vahídos en nuestra oración, a fin de que no cejemos un punto en el ejercicio de las prácticas piadosas y en el santo servicio de Dios. Es bien conocida la tradición que tienen los leales devotos de esta santa, de orarle para hacerle necesidades.
Que mis lágrimas sean secadas bajo el poder de la luz divina. Obtén de Dios Padre la gracia del arrepentimiento y el perdón a través de mi más sincera confesión. Libera mi corazón y mi alma de las angustias que me oprimen y devuélveme la calma a mi ser, la calma que precisa. Rezar el Credo, la Salve, tres Padrenuestros, tres Avemarías y tres Glorias.
Se le atribuyeron poderes desde pequeña. Según cuenta la historia, durante una tarde mientras que ella dormía en su cuna y sus padres trabajaban en el campo, un conjunto de abejas colmó la vivienda y picó a múltiples personas en el sitio. Gracias poderosa servidora, intercede singularmente por las uniones matrimoniales en crisis y por quienes aun con sus uniones disueltas, tienen la posibilidad de por obra tuya ante el cielo, recuperarlas; Santa Rita de Casia intercede y suplica por mi matrimonio. Desde pequeñísima, la vida de Sata Rita estuvo marcada por milagros. Cuenta una historia que en un momento de su crianza la pequeña Rita fue dejada sin cuidador en su cuna mientras que sus padres trabajaban, momento en el que fue cercada por un enjambre de abejas pero éstas no la picaron.
Santa Rita sufrió esta llaga en su frente por 15 años en representación de su amor a Jesús. Oh Dios, Muy santa Trinidad, te agradecemos las gracias que concediste a la Santísima Virgen María y a tu sierva Filomena, por cuya intercesión imploramos tu clemencia. Te adoro, Dios santo, y te amo de todo corazón, tú que remedias todas y cada una nuestras pretensiones, te alabo, te amo y te bendigo con todos y cada uno de los ángeles, como a mi Dios y a mi Constructor; te presento todos los méritos de tu sierva Santa Rita de Casia, patrona y letrada mía, a quien concediste el don de pacificar los corazones difíciles, y de poner paz en las familias. Humildemente te suplico, Dios nuestro, que por su intercesión, pueda unirme más a ti y me preserves del pecado y de todo mal, concediéndome la gracia que te pido en esta NOVENA…, si es para gloria tuya y bien de mi alma.