Oh Mi madre, sé que escucharás, y me lograrás estas y cuantas gracias te pida, pues las pido por el amor que tienes de tu Hijo Jesús. Permite que todo tengamos la posibilidad ser tus hijos, que nos tengamos la posibilidad confortar contigo, que tengamos la posibilidad sentir tu protección de cualquier riesgo que nos aceche, apóyanos en nuestras luchas diarias y permite que tengamos la posibilidad querer y ser útil a Jesús para estar siempre al lado de ustedes en la eternidad. Esta oración la puedes hacer para pedirle por la curación de todos y cada uno de los humanos, no únicamente de los que están enfermos de cuerpo, sino más bien también de aquellos que se ha separado de la fe, a fin de que logren de nuevo el sendero de la salvación. Madre de Jesucristo que has sido la intercesora en todas y cada una de las acciones de tu hijo sagrado mientras estuvo en la tierra y ahora que está en los cielos, te solicitamos que ruegues por nosotros y que consigas obtener para nosotros la petición especial que te hacemos, para la voluntad de Dios, Amén. Llenos de aflicción y con lágrimas fluyendo de los ojos, asistimos en las horas amargas de la patología a tu maternal corazón, para pedirte que derrames a manos llenas el tesoro de tu clemencia sobre nosotros. Adoración Eucarística con niños Se explica lo que se hará.
Tu santa e inmaculada concepción, danos tu ayuda, ya que hemos pecado, llénanos de humildad a fin de que podamos convertirnos y llevar a cabo penitencia, y enséñanos tus oraciones a fin de que recemos por toda la raza humana. Se nuestra guía en la vida, a fin de que tengamos la posibilidad caminar como peregrinos dentro de la iglesia, ayúdanos a que tengamos apetito de estar en la Eucaristía, para ser parte del pan de la vida. ¡Oh muy, muy dulce Jesús crucificado, hijo unigénito del Eterno Padre, y de la Inmaculada Virgen María! Inmaculada Señora y Madre mía, por el grande amor que mostrasteis a los hombres, dignándote mostrarse en una tosca gruta e enseñar a la joven y dichosa Bernardita, os suplico me hagáis merced de alegrar mi corazón con vuestras influencias soberanas.
Viernes, San Carlos Borromeo, Obispo 4-11-2022
Gracias, gracias, gracias por regresarle la salud. Madre mía también les pido por mis progenitores, a fin de que vivan unidos en el cariño; por mis hermanos, familiares y amigos, para que viviendo unidos en familia un día podamos gozar con Vos en la vida eterna. ¡Oh María inmaculada de Lourdes! A la que el Espíritu Santurrón lleno de maravillas, y que con su poder te logró estar al costado del padre, a fin de que fueses la gloria de su Hijo viviente, míranos de nuevo con tus ojos de madre a fin de que veas la pobreza de los cuerpo y del alma, a fin de que consigas reconfortarnos y que brilles a nuestro lado en el momento de nuestra muerte. Has que nuestra petición, llegue a oídos de tu hijo Jesucristo a fin de que le llegue la sanación si es para la gloria de Dios. Consigue para todos nosotros el perdón de los errores que hemos cometido, y danos paciencia y resignación ante el padecimiento que estamos pasando, puesto que sabemos que tu amor es grande y justo, y que Dios va a estar con todo nosotros.
La Virgen María, Salvo Mi vida soy consagrado a la virgen de Fátima y a la del Topo en Colombia. Nos comprometemos a rezar todos y cada uno de los días el Santo Rosario, por el hecho de que sabemos Madre Bendita que es tu deseo. Confiamos Madre de Dios y Madre nuestra, en tu poderosa intercesión. Tú que siempre y en todo momento tienes el oído bien preparado para escucharnos y con tu tierna mirada allanas nuestros caminos, te quiero soliciar que me acompañes con tu fuerza y tu poder me asistas con tu noble y simple corazón lleno de amor y me bendigas con tus manos siempre y en todo momento abiertas a ofrecer. En todos nosotros mensajes de paz, amor y promesa. Sanando tantas víctimas del dolor, almacena también una observación de bendición para nuestro pobre enfermo.
Con esta oración por los enfermos que hagas a la Virgen de Lourdes vas a poder, pedir por su intercesión a fin de que sane tu familiar, amigo o hasta tú mismo, tienes que hacerla e invocarla a fin de que ella intervenga por tu salud frente Dios. Este viernes, 11 de febrero, la Iglesia Universal celebra el día de la Virgen de Lourdes,una de las advocaciones de la madre de Jesucristo a la que más milagros se le atribuyen. Fue tal día como hoy del año 1858 en el momento en que la Reina del Cielo se apareció en un pequeño pueblecito francés –Lourdes-a una pequeña llamada Bernardette Subirous, que con el tiempo, en su sendero de perfección, alcanzó la santidad. Oh Señora de Lourdes, Madre de Cristo, tu que tuviste predominación con tu divino hijo mientras que permaneciste sobre la tierra tienes ahora la misma predominación en el cielo. Suplica por nosotros y obtén para nosotros de tu divino Hijo nuestras particulares necesidades si esa es la Intención de Dios. Al manifestarse en la Gruta de Lourdes te complaciste en llevar a cabo de él un santuario favorecido desde dónde dispensas tus favores y donde ahora muchos obtuvieron la cura para sus anomalías de la salud, tanto espirituales como físicas.
Acudimos ante ti madre para soliciar tu mediación, para que consigas conseguirnos, madre adorada, que se conceda nuestra petición, te agradecemos todos los favores que nos concedes y de ahí que prometemos ser leales a tus virtudes e imitarte en todo instante para ser parte de tu gloria. Hacedme dócil al espíritu; y por el fervor de mi fe, por la manifestación de mi vida, por mi dedicación al servicio de los enfermos, haz que yo trabaje con Vos en confortar a los que padecen, en reconocimiento a los hombres, en trabajar por la unidad de la Iglesia y por la paz del mundo. Señor mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío, en quien creo, en quien espero y a quien amo sobre todas las cosas; humildemente postrado frente vuestra divina majestad, les solicito me perdonéis todas las ofensas e ingratitudes que he cometido contra Vos. Conozco, Señor, que soy impropio de parecer ante vuestra presencia; por lo cual vengo a Vos por medio de vuestra amantísima Madre, a la que suplico interceda por mí, para alcanzarme el perdón de los errores que yo de corazón detesto, y propongo con vuestra felicidad no volver a cometer.
Sigan produciendo frutos rebosantes en los años venideros. Con toda seguridad, oh Señora mía, yo os dirijo esta plegaria y os pido que la acojáis y la atendáis. «Señora, ¿tendréis la bondad de decirme quién sois y cuál es vuestro nombre?
Frases Oraciones A María
Que por medio de tu inocencia dulce María inmaculada y por la gloria que Dios te ha dispensado puedas cubrir nuestras esperanzas y sueños de paz para realizar la proclamación de tu dogma. Reina pura de todos los ángeles, que pudiste ver la luz de la creación del sol, que es Jesucristo nuestro Señor. Asimismo puedes realizar otras frases que son más cortas a la Virgen de Lourdes, para que pidas por los enfermos, o llevar a cabo alguna petición particular, solo tienes que elegir cual es la mucho más correcta a tu situación o sentimiento, siempre y cuando la hagas con fe y devoción ellas serán escuchadas por la virgen y van a ser elevadas a Jesús para su concesión.
En tanto que Dios obra por tu mano curaciones sin cuento en la Gruta espectacular de Lourdes, sanando tantas víctimas del mal, almacena también una observación de bendición para nuestro pobre enfermo… Alcanzadle de vuestro Divino Hijo Jesucristo la deseada salud, si debe ser para mayor gloria de Dios. Pero mucho más alcanzadnos a todos el perdón de nuestros errores, paciencia y resignación en los sufrimientos y más que nada un amor grande y eterno a nuestro Dios prisionero por nosotros en los Sagrarios. Obedientes a la invitación de tu voz maternal, oh Virgen Inmaculada de Lourdes, asistimos a tus pies en la humilde gruta donde aparecisteis para señalar a los extraviados el camino de la oración y penitencia, dispensando a los que padecen las gracias y prodigios de tu soberana bondad. Muy santa Virgen de Lourdes, que a ninguno desamparas ni desechas, mírame con ojos de piedad y alcánzame de tu Hijo perdón de mis pecados a fin de que con devoto afecto celebre tu santa y también inmaculada Concepción, en tu milagrosa imagen de Lourdes y reciba después el galardón de la bienaventuranza del mismo de quien eres Madre. Soy un milagro que vive en el planeta aun gracias a la virgen María y reconozco que lo mismo que paso en Fátima paso cuando yo estaba en coma me visito con su esplendor, tomo mi mano y me saco de allí.
Oye Señora mis ruegos, y por el gran privilegio de tu Concepción en felicidad, concédeme fortaleza para vencer mis pasiones, y con especialidad la que mucho más me combate; pues con tu intercesión y con el auxilio de la gracia, sugiero emprender la lucha hasta lograr la victoria. Por mi Señor Jesucristo que vive y reina por los siglos de los siglos. ¡Oh Inmaculada María; toda bella, pura y sin mácula desde el primer momento de vuestra Concepción!
La madre de la misericordia, la salud de los enfermos y el cobijo para los pecadores, eres el consuelo de aquellos que están afligidos, tu sabes cuales son nuestros anhelos, inconvenientes y sufrimientos, por eso te solicitamos que vuelvas tu mirada hacia nosotros con clemencia. Bienaventurada seas siempre, virgen llena de pureza, puesto que has podido manifestarte en todo tu esplendor, en la vida llena de tiernicidad y de hermosura en la gruta de Lourdes, dístela bendición a Santa Bernardette, diciéndole que era la Inmaculada Concepción. Muy frecuentemente te hemos bendecido como nuestra Virgen Inmaculada. ¡Virgen Muy santa que de la dura peña hiciste brotar agua milagrosa, que sana las patologías del cuerpo y del alma! Arranca, poderosísima Señora, de nuestro embrutecido corazón, lágrimas de verídica penitencia, para que laven la lepra del alma, a fin de que el Señor nos perdone y levante de nosotros el azote de su indignación. El libro de la fe de los pequeños Despertar religioso en familia Sumario Estoy bautizado, soy cristiano…
Tetiana Shkurenko: “cada Día Doy Gracias A Dios Por Haberme Tolerado Realizar Algo Mucho Más Por Las Familias”
¡Oh María Inmaculada, Santísima Virgen de Lourdes! Deseando llevar a cabo esta novena con la mayor devoción de mi alma, y contestar al llamamiento que en persona de la humilde Bernardita, habéis hecho a todos vuestros hijos, me postro a vuestro pies para escuchar con atención vuestra voz, exponeros mis necesidades y solicitar vuestros amorosos cuidados. Por estos títulos de tu Concepción Muy pura, te suplico, Reina mía, que de qué manera Águila real me ampares bajo las alas de tu protección piadosa; como Aurora de la gracia esclarezcas y también ilumines con tus fulgores mi alma; como Centro del amor enciendas mi voluntad para que arda en el divino; y que me admitas benigna como a tu fiel morador en la Jerusalén triunfante, de la que eres Reina sublime.
Oración Al Divino Niño Para Necesidades Urgentes Y Desesperadas
Y de esta forma, Señora, como hicisteis brotar en la gruta de Lourdes aquel manantial riquísimo de transparentes y saludables aguas, para remedio del cuerpo, derramad sobre mi pobre alma las dulcísimas y fértiles aguas de la felicidad, que apaguen mi sed por las cosas de la tierra, y limpien mi espíritu a fin de que sea digno de los disfrutes purísimos del cielo. Les pido de una forma especial por la conversión de los pecadores y la paz del mundo; por los niños, para que jamás les falten los auxilios divinos y lo necesario para sus cuerpos, y un día hallar la vida eterna. Recibe de nosotros las alabanzas y suplicas que te hacemos para todos los pueblos y naciones, ya que nos encontramos juntos en esta angustia y amargura, y elevamos nuestras frases hacia ti. Virgen de Lourdes la aparición llena de luz, te pedimos que apartes las tinieblas que tapan la luz de la fe, ayuda aquellas almas que están necesitadas, se tu nuestra esperanza y la fuente de las aguas sanadoras que logren reanimar los corazones mucho más duros con tu enorme caridad. Tu que eres la aurora de la eterna luz, que se viste de felicidad en el fulgor, el centro del amor divino, en donde la trinidad vio su complacencia, tu que fuiste creada sin mácula ni pecado, te solicito querida madre que logres ampararnos bajo tus alas, que nos des tu protección, y que nos des tu felicidad. En el momento en que te vieron en la gruta tuviste el exitación de que allí se hiciera tu santuario el sitio privilegiado en donde darías tus favores y bendiciones, y en donde varios serian curados de sus patologías físicas y espirituales.
Las dos oraciones están agarradas en un antiguo devocionario en español anunciado en París a fines del siglo XIX, o sea poco tiempo tras las apariciones de Lourdes . La primera recibió la aprobación del obispo de Tarbes el 30 de octubre de 1867. Haz que nosotros tus hijos, confortados por Ti en las penas, protegidos en los peligros, apoyados en las luchas, amemos y sirvamos a tu dulce Jesús, y merezcamos los disfrutes eternos junto a Ti. Recibid, oh reina compasiva, las alabanzas y súplicas que pueblos y naciones, unidos en la angustia y la amargura, elevan confiados a Ti.