Aquí dejaron que sus ovejas pastorearan mientras ellos jugaban en la pradera que tenía algún que otro árbol de roble. Tras haber tomado su almuerzo alrededor del mediodía eligieron rezar el rosario, aunque de una forma un tanto trucada, diciendo sólo las primeras expresiones de cada oración. Al instante, ellos padecieron un sobresalto, que después describieron como un “rayo en la mitad de un cielo azul”. Pensando que una tormenta se acercaba se debatían si debían recoger las ovejas y también irse a casa.
Algunos dijeron haber visto cambios de colores sucesivamente. Estas serían las últimas apariciones en Fátima para Jacinta y Francisco. No obstante, a Lucía, nuestra Señora se la apareció una séptima vez en 1920, como lo había prometido la Señora el mes de mayo. En esta ocasión Lucía se encontraba en oración en la Cova, antes de dejar Fátima para proceder a un internado de pequeñas. La Señora vino para alentarla a que se dedicara enteramente a Dios. La guerra próximamente acabará, y los soldados retornarán a sus hogares.
Desde aquí recomendamos que si desea donar un manto es preferible que ayude a volver a poner alguno antiguo, quedando perseverancia de ello en el manto, estos mantones restaurados suelen ser bastante mas vistos vistiendo la imagen. La mayoría de las ocasiones la imagen viste sus mejores mantones, en otras ocasiones transporta mantos que son importantes por su antiguedad. En cuanto cumplí la mayoría de edad pasé al trono, bajo su mantón azul, donde prosigo hoy por hoy hecho un hombre. Las gentes se preguntaban los unos a los otros lo que habían visto. La gran mayoría admitió ver el sol danzando y tremiendo, otros afirmaban que habían visto el rostro de la Virgen Muy santa. Otros juraron que vieron el sol girar como una rueda que se acercaba a la tierra como si fuera a quemarla con sus rayos.
Mantón Paquirri
En la tarde del día 17 muchas personas disfrutan de los múltiples conciertos y bandas de gaita que cantan en los pubs, clubes y discos. La fiesta empieza el día 17 y se prolonga hasta la madrugada del día 18, con el “Gaitero Daybreak”. Mucha gente va al juego de béisbol de Chinita justo después de esta fiesta clásico ahora los “Toros coleados” por la tarde. Otras actividades culturales se realizan a lo largo de la feria.
La saya de la Virgen está bordada a juego sobre terciopelo blanco. El mantolín del Niño es a juego con el mantón y la saya de la Virgen es de brocado azul y plata, confeccionada como novedad, formando tablas. Terno completo de mantón, mantolín y saya donado en cumplimiento de una promesa por Doña Josefa Expósito Cuevas en su nombre y el de su familia. Soy hermano de la Cofradía del Prendimiento ya hace ahora 20 años, y portador de María Santísima del Enorme Perdón desde hace 16.
¿cuándo Fueron Aprobadas Las Apariciones De La Virgen En Lourdes?
El conjunto es de mantón, saya y mantolín del Niño haciendo juego. El bordado es simétrico y muestra piezas de oro fino con elementos del vestido de torear. En la parte de atrás del mantón tiene bordado el escudo de Mengíbar. De terciopelo en color azul bordado a máquina en el convento de las Mamás Clarisas de Alcaudete. Probablemente este mantón fue donado por el Rey Alfonso XIII y su mujer Victoria Eugenia en 1917 con motivo de una promesa a la Stma. Es un mantón de raso blanco bordado en oro con decoraciones florales complementado con una Ave Maria coronada en el reverso.
Desde 1897 un grueso vidrio protege la pintura de las inclemencias del tiempo y de los excesos del fervor peregrino. Gracias a los volubles imperativos del gusto estético, la imagen padeció una transformación extremista hacia finales del siglo XVI o principios del XVII, para ser vestida con ricas telas, según la tendencia de la corte de los Habsburgo. Para ser vestida, la talla primitiva padeció una drástica intervención, quizá a finales del siglo XVI, consistente en la supresión de los brazos y las manos y el cambio de la figura del niño. La escultura se completó entonces desde los hombros hasta una altura total de 1,5 m. La reina es la señora de la Corte, la señora de la devoción cristiana es la imagen de la Virgen María, esa entronización y vestimenta como una reina con manto y corona recrean esa iconografía. Está todo rematado por una cenefa en los bordes de tres galones y puntillas en hojilla de oro.
El Beato Padre consagrará a Rusia a Mi Inmaculado Corazón, y esta va a ser transformada y el mundo gozará de un periodo de paz. Recordad, no debeis decirle esto a nadie mucho más que a Francisco. Unos minutos tras haber llegado a Cova da Iria, cerca de la encina, donde un elevado número de personas estaban rezando el Rosario, vimos un flash de luz de nuevo, y un instante después Nuestra Señora se apareció en la encina. Rezad el Rosario todos y cada uno de los días, para traer la paz al planeta y el desenlace de la guerra.
Terno que se constituye de manto colorado, saya, 2 mantolines y puñetas todo bordado en oro por Don Antonio Roldán. El manto preservado y denominado de Isabel II es realmente otro, donado por Fernando de Cuadros, Coronel del ejército y apoderado de la Cofradía Matriz en La capital española, en la relación de aquella entonces con la vivienda real española, muy dinámica en aquella temporada. Popularmente se conoce como el mantón de la aparición, es uno de los mantones mas antiguos que se mantiene de la Virgen de la Cabeza.
Sin embargo cuando el sol había llegado a su auge la Señora se apareció como había dicho. Durante la noche del 12 al 13 de octubre había llovido toda la noche, empapando el suelo y a los cientos de peregrinos que viajaban a Fátima de todas partes. A pie, por carro y en carretas venían, entrando a la zona de Cova por el sendero de Fátima – Leiria, que actualmente todavía pasa frente a la enorme plaza de la Basílica. Hoy día, en el lugar está la capillita actualizada de vidrio, encerrando la primera que se edificó y la escultura de Nuestra Señora del Rosario de Fátima donde se encontraba la encina.
Cuando al fin el sol dejó de saltar y de moverse todos respiramos aliviados. Aún estábamos vivos, y el milagro pronosticado por los niños fue visto por todos. En relación los pequeños, consiguieron llegar a Cova entre las adulaciones y el escepticismo que los había perseguido desde mayo. En el momento en que llegaron, hallaron críticos que cuestionaban su certeza y la puntualidad de la Señora, quien había prometido llegar al medio día.
No deseaba la de mi barrio, no quería una de renombre, quería salir en la Virgen del manto azul que es la que asistió a que desde aquel año seamos una familia normal; pobres, pero al final de cuenta habitual. Lucía, Francisco y Jacinta siguieron haciendo lo que el ángel les había enseñado, orando y ofertando sacrificios al Señor. Lucía tenía en este momento 10 años, Francisco nueve en Junio y Jacinta terminaba de cumplir siete en marzo, cuando el 13 de mayo de 1917, decidieron llevar sus ovejas a unas lomas que pertenecían al padre de Lucía conocidas como Cova da Iria, o Ensenada de Irene. Fue ahí, solo con una excepción, donde la Muy santa Virgen bajo el nombre de Nuestra Señora del Rosario se les apareció en seis ocasiones en 1917, y una novena vez en 1920 (sólo a Lucía).
Sobre la tela blanca está bordado con enrejado en hilo en oro con con detalles florales autóctonos de la Sierra de Andújar y frutos como madroños todos ellos complementados con incrustaciones de piedras de Swarovski. La vuelta a la localidad de la familia real se produce el día once de octubre. En esa día, en una ceremonia oficiada en Santa María, se le proporciona a la Reina el cargo de HERMANA MAYOR PERPETUA, y se le proporciona de forma simbólica el cetro aceptándolo «muy gustosa».
En el instante en el que ella dijo las últimas expresiones, abriendo sus manos, Ella nos transmitió por segunda vez, el reflejo de esa luz intensa. Jacinta y Francisco parecían estar en la una parte de la luz que se elevaba hacia los Cielos, y yo en la parte que se vertía sobre la tierra. Frente a la palma de la mano derecha de Nuestra Señora se encontraba un corazón cubierto de espinas que parecían clavársele. Entendimos que era el Inmaculado Corazón de María ofrecido por los errores de la humanidad, deseando ansiosamente reparación.